El petróleo terminó con una baja de más de 5% este miércoles, aplastado por las cifras de reservas en Estados Unidos y temores sobre un debilitamiento de la demanda de crudo.
El precio del barril de WTI para entrega en noviembre cedió 5,61% a 84,22 dólares en Nueva York.
En tanto el barril de Brent del mar del Norte para diciembre cedió 5,62% a 85,81 dólares en Londres.
Las dos variedades de referencia del mercado cayeron a sus niveles más bajos en un mes.
Esta caída se debe al informe semanal de la Agencia estadounidense de Información sobre Energía (EIA), que dio cuenta de los menores volúmenes de entrega de gasolina en Estados Unidos en 25 años para esta época del año.
Este sacudón de lo que los operadores llaman demanda implícita, explica también la disparada de las reservas de gasolina en el país, que crecieron en 6,5 millones de barriles (mb) en la semana que terminó el 29 de setiembre. Los analistas esperaban que se mantuvieran estables.
"Esperemos a ver las cifras de la semana próxima" para hablar de tendencia, matizó Phil Flynn, de Price Futures Group.
Además "las tasas de los bonos (del Tesoro estadounidense) remontaron de forma brutal" y "los consumidores tienen mayores dificultades" para sostener sus compras en este entorno, añadió el analista.
"Los precios del crudo reciben de lleno (el golpe de) los temores de una desaceleración económica mundial, a pesar de las reducciones de producción prometidas por Riad y Moscú hasta fin de año", explicó José Torres, de Interactive Brokers, en referencia a los anuncios de Arabia Saudita y Rusia de recortar sus volúmenes de producción en 1,3 mb diarios.
El miércoles la reunión ministerial de la OPEP y sus aliados en la Opep+, recomendó mantener los niveles actuales de producción.