¿Sanciones, por fin?
Hoy será clave para la posibilidad de que, por primera vez, pese a que el acuerdo de paz fue firmado en 2016, se pueda acercar la fecha en que la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), presidida por el magistrado Roberto Carlos Vidal, pueda imponer algún tipo de sanción a la cúpula de la extinta guerrilla de las Farc. Esto porque comienzan las Audiencias de Observaciones de las víctimas y comparecientes dentro del juicio que inició el Tribunal Especial para la Paz contra el último Secretariado de la facción de esa guerrilla que sí se desmovilizó, cuyos integrantes fueron acusados por crímenes de guerra y lesa humanidad dentro del Caso 01, que investiga los secuestros. De esta forma, según la propia JEP, se activa una nueva etapa en el proceso judicial de la JEP que acerca a la etapa de imposición de las primeras sanciones.
Toda la cúpula
En la diligencia judicial, convocada para hoy y el jueves, por la Sección de Primera Instancia para casos de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad, las víctimas y sus apoderados, así como los representantes de los comparecientes, harán sus observaciones sobre la resolución de conclusiones que determinó que los exFarc aceptaron su responsabilidad en los crímenes de guerra de toma de rehenes, crimen de lesa humanidad de graves privaciones de la libertad y otros crímenes internacionales cometidos de manera concurrente, según la acusación. Entre los sindicados están Rodrigo Londoño Echeverry, Jaime Alberto Parra, Milton de Jesús Toncel, Pablo Catatumbo Torres Victoria, Pastor Lisandro Alape Lascarro, Julián Gallo Cubillos y Rodrigo Granda Escobar.
Audiencia clave
De acuerdo con la jurisdicción especial el objetivo de la audiencia es que la “magistratura cuente con suficientes elementos de juicio que le permitirán adoptar la decisión, conforme la normatividad que rige la JEP, sobre si existe o no correspondencia. Es decir, se trata de contar con los diversos elementos de juicio que le permitan concluir si hay correspondencia entre los hechos, las conductas reconocidas, las pruebas allegadas, las calificaciones realizadas, los presuntos responsables, la propuesta de sanción y la valoración del reconocimiento de verdad y responsabilidad por parte de los exFarc. La decisión final admite recurso de reposición por parte de los comparecientes y las víctimas”.
Larga espera
Como se dijo, este sería el primer caso en el que la JEP se acerca a la posibilidad de imponer sanciones a los exFarc. Han sido muchas las críticas a la demora para llegar a esta instancia. Desde muchos sectores se ha cuestionado insistentemente que la cúpula de los desmovilizados haya podido, incluso, hacer política sin que la JEP haya expedido una sola condena. Lo que más controversia causa es que llevan más de cinco años ocupando diez curules de asignación automática en el Congreso, pese a que sus votaciones en las elecciones parlamentarias de 2018 y 2022 fueron ínfimas.
Nada de cárcel
Hay que dejar en claro que sea cual sea la condena no habrá lugar a ir a la cárcel. Las sanciones a imponer apenas exigen la realización de trabajos, obras y actividades con contenido reparador-restaurador, junto a medidas de “restricción efectiva de libertades y derechos” pero no necesaria y obligatoriamente en prisión. De hecho, prácticamente está acordada la cero cárcel. Asimismo, la Sección supervisará y certificará el cumplimiento efectivo de la sentencia, la que también será verificada por el Mecanismo de Monitoreo y Verificación conformado por la Misión de la ONU y la JEP.