
Luego de las elecciones presidenciales los congresistas están planteando un vuelco completo en la cúpula de las colectividades a las que pertenecen.
Es el caso del Partido Social de Unidad Nacional (La U), en el que el senador Manuel Enríquez, que se apartó de la decisión institucional de apoyar a Germán Vargas Lleras y desde la primera vuelta se fue con el candidato presidencial uribista Iván Duque, consideró necesaria “una reorganización de las directivas” en los próximos días “para que antes de la instalación del nuevo Congreso se tengan a las directivas renovadas”.
Pero otra voz de esa colectividad, también proveniente de Nariño, la del representante Berner Zambrano, consideró que “no es el momento de hablar de renovación o mover las actuales directivas”.
Por su parte, el senador Armando Benedetti dijo que “yo no sé. El partido está en un desorden grande. Fíjese que nosotros teníamos el logo con Germán Vargas. Y todo el mundo hizo lo que se le dio la gana. Cuando todo el mundo hace lo que se le dé la gana, quiere decir que no hay partido”.
Cambio Radical
En cambio en Cambio Radical, aunque se habla de un cambio de nombre en la dirección, no se trata de cambio de rumbo, pues se está proponiendo que quien asuma la jefatura sea Germán Vargas.
Así lo manifestó el representante vallecaucano Carlos Abraham Jiménez, para quien el partido “tiene que hacer una reingeniería”, anotando que no sabe si Vargas Lleras “quiera ser el presidente del partido, pero se abre una puerta para revisar cómo va ser el nuevo gobierno ya con Germán Vargas no como candidato presidencial, sino como un miembro activo de Cambio Radical”.
Pero el presidente de la Cámara, Rodrigo Lara, cree “que tenemos un buen director. Estoy muy a gusto con el doctor Jorge Enrique Vélez. Esperemos ver qué plantean las bases del partido después del 20 de julio”.
A su turno, el representante cundinamarqués Jorge Roso expresó que “sería productivo darle un cambio, para darle una nueva proyección en las próximas elecciones”.
Partido Liberal
Es en el Partido Liberal en donde el cambio de dirección es pedido con vehemencia por un sector de la bancada.
Por ejemplo, el senador Horacio Serpa afirmó que, aunque “la solución no es acabar los partidos ni denigrar de los partidos, sino mejorar los partidos, y mejorar la política”, si le parece que “debe haber una renovación en general y tiene que mirarse también el aspecto programático. Desde luego, gente nueva al frente de las responsabilidades partidistas”.
Con todo, Carlos Alejandro Chacón, representante nortesantandereano, manifestó que “para tres semanas” que faltan para las elecciones “no da para romper con la institucionalidad de un partido. Eso no es serio. Eso es oportunismo político”.
Harry González, representante por el Caquetá, expuso que “lo que por ahora el partido debe hacer es abocar con responsabilidad su plataforma política. Ya habrá tiempo para mirar las cosas dentro del partido”.
Ayer mismo se conoció una carta de 44 congresistas liberales que reafirmaron su apoyo a Gaviria y la sujeción a sus determinaciones.
El representante por el Atlántico y senador electo Mauricio Gómez se mostró complacido de que 44 de los 49 parlamentarios apoyen la continuidad del expresidente Gaviria al frente de la Dirección Nacional del Liberal y anticipó que su voto será por el candidato presidencial Duque.
“Respeto a Gustavo Petro como persona, pero él tiene un discurso de ricos y pobres que divide y polariza al país”, argumentó Gómez.
Partido Conservador
Por los lados del Partido Conservador las aguas están más calmadas.
El senador Eduardo Enríquez precisó el senador Hernán Andrade, presidente del Directorio Nacional Conservador, “ha sido un presidente sereno, reflexivo. Hace gala de la autoridad y la disciplina, por lo tanto creo que no habrá variación”.
Sin embargo, para el representante por Bogotá, Telesforo Pedraza, “cuando se cae todo el tejado, hay que reconstruirlo. En el caso del Partido Conservador está sin norte, un partido sin dirección, un partido que de 80 parlamentarios, quedamos en 33”.