
“Los riesgos electorales pasaron de ser corredores que atravesaban importantes zonas del país a ser regiones específicas en las que se concentran economías ilegales y diferentes actores armados”, de acuerdo a Alejandra Barrios Cabrera, directora nacional de la MOE.
Ante esta situación, la MOE solicitó al Gobierno Nacional, a las autoridades electorales y a medios de comunicación, especial atención a estos 170 municipios de los cuales 64 están en riesgo extremo, 65 en riesgo alto y 41 en riesgo medio.
Mayor Vigilancia
En Antioquia los municipios bajo esta condición son: Briceño, Cáceres, Remedios, San Andrés de Cuerquía, Tarazá; en Arauca, Arauquita; en Bolívar, Arenal; en Cauca, Corinto; en Chocó, Bajo Baudó y Medio Baudó; en Córdoba, Buenavista y Cotorra; en Guaviare, Miraflores; en Meta Vistahermosa; en Nariño, Barbacoas; en Norte de Santander, Convención, El Carmen, Hacarí y La Playa. Son los municipios donde la MOE solicitó a las autoridades una vigilancia especial y presencia de las autoridades responsables del normal desarrollo del proceso electoral. De acuerdo al estudio realizado por el grupo de expertos, en estos municipios se aumentó el nivel de riesgo a extremo para 2018.
Según los datos suministrados por la MOE, los factores indicativos de fraude, tanto en Cámara de Representantes como en Senado, han presentado leves disminuciones; mientras que para las elecciones de 2014 la MOE señalaba 410 municipios en riesgo para Senado y 386 municipios en riesgo para el Cámara de Representantes, para 2018 la MOE alertó riesgos en 379 municipios para Senado y 355 en Cámara.
Para Alejandra Barrios “estamos viendo una leve disminución del riesgo asociado a las prácticas políticas locales; no obstante, los niveles de municipios con niveles extremos de riesgo aumentaron, lo que implica que las autoridades deben mantener acciones preventivas sobre posibles delitos e irregularidades electorales que se presenten en esos municipios”.
El informe de Mapas de riesgo electoral señala 45 municipios en riesgo extremo por factores indicativos de fraude en Cámara y 34 en Senado.
La mujer representante
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la directora de la Misión de Observación Electoral, señaló que “si bien la implementación de la Ley 581 de 2000 conocida como “Ley de Cuotas” fue importante hace casi dos décadas para impulsar la participación de la mujer en la política electoral, hoy es insuficiente. Es necesario pasar de la participación en las listas a la representación efectiva”.
Según la MOE, las características del sistema electoral colombiano y sus dinámicas de selección de candidatos para la conformación de las listas son procesos poco objetivos y poco democráticos que no facilitan la participación de la mujer. De los 32 departamentos, solamente en 14 se debe cumplir la Ley de Cuotas; es decir, en la mayoría las listas pueden estar compuestas solo por hombres. Es más grave aun cuando se tiene en cuenta que desde la Constitución de 1991, no se ha elegido nunca a una mujer como Representante a la Cámara en 13 departamentos, los cuales son: Amazonas, Caquetá, Guaviare, Vaupés, Guainía, Casanare, Arauca, Chocó, Cesar, La Guajira, Quindío, Risaralda y Norte de Santander, cuyo caso es preocupante ya que a pesar de que debe cumplir Ley de Cuotas, no ha elegido una representante desde 1991.
Mientras que 43 años atrás, María Eugenia Rojas de Moreno-Díaz era la única mujer candidata a la presidencia en las elecciones de 1974 por la ANAPO (Alianza Nacional Popular), hoy tenemos a Piedad Córdoba y Viviane Morales como las dos candidatas a la presidencia inscritas hasta el momento; una precandidata a la presidencia, Marta Lucía Ramírez; y tres candidatas a la vicepresidencia, Clara López, Claudia López e Imelda Daza; esto demuestra claramente el aumento de la participación de la mujer colombiana en los más altos escenarios de decisión del país.