Con el argumento que hay una "incapacidad para parar la guerra", las disidencias de las Farc, comandandas por alias 'Iván Mordisco', conocidas como el Estado Mayor Central, disolvieron el grupo de contingencia que habían acordado con el Gobierno Nacional.
En un trino ese grupo guerrillero , manifestó que "se disuelve el grupo de contingencia pactado entre el Gob. Nal. y las FARC-EP, cuya función era resolver las dificultades que se presentaran previas a el cese al fuego".
Insistió, en esa misma red social que el "grupo está atado de manos".
Cabe recordar, que el Gobierno y la organización criminal tenian un acuerdo preliminar para avanzar en el proceso de paz, mismo que tenía 11 puntos de partida.
Desde Cauca, donde se han llevado a cabo las diferentes reuniones entre delegaciones se reveló que uno de los puntos de mayor relevancia era precisamente el cese al fuego bilateral.
"La delegación del Gobierno Nacional en representación del Estado colombiano y la del Estado Mayor Central de las Farc, en desarrollo de la fase preliminar, instalaremos la Meda de Diálogo con toda su arquitectura jurídica, política y presencia de la comunidad como garantes y acompañantes", se lee en un comunicado emitido por parte de ambas delegaciones.
Es importante resaltar que estas disidencias se apartaron en 2016 del histórico acuerdo de paz que desarmó al grueso de la que fue la guerrilla más poderosa del continente.
En vísperas de nuevas conversaciones con el gobierno mostraron músculo en el suroeste del país al explotar dos coches bomba contra estaciones policiales en tres días.
"Reconocemos como error la imprecisión en esta acción militar en la que resultaron dos civiles muertos y cinco heridos", admitió el EMC refiriéndose al atentado del miércoles en el poblado de Timba, departamento del Cauca.
Otro vehículo explotó este viernes contra una estación policial en el municipio de Jamundí, en el departamento del Valle del Cauca (suroeste) y dejó al menos cinco civiles heridos.
El coche quedó destruido y disperso en cientos de pedazos incinerados a lo largo de la vía, constató un periodista de la AFP.
Los ataques contra la fuerza pública son una represalia por su ofensiva militar para golpear el narcotráfico, según Petro.
"Seguimos afectando las economías ilegales y la reacción son hechos de violencia. No cederemos. La Fuerza Pública debe copar militarmente el territorio y como gobierno llegaremos de manera integral a estas poblaciones", aseguró el mandatario en la red social X, antes Twitter.