
La pérdida del grado de inversión a Colombia por parte de la firma Fitch Ratings, produjo el efecto cascada que se esperaba y ayer rebajó la calificación a las empresas colombianas Ecopetrol SA, Oleoducto Central SA, A.I. Candelaria, Isagen, UNE EPM Telecomunicaciones e Interconexión Eléctrica SA.
Señaló la firma en un comunicado, que la rebaja de Ecopetrol, Oleoducto Central SA, ISA y A.I. Candelaria “refleja la vinculación directa e indirecta de estas empresas con la calificación soberana de Colombia”.
Indica Fitch, que por su parte, la rebaja de Isagen y UNE EPM Telecomunicaciones refleja el tope de calificación de la deuda colombiana, “ya que estas empresas no tienen activos sustanciales, líneas de crédito offshore o efectivo en el exterior para reducir el riesgo de transferencia y convertibilidad”.
La semana pasada la firma rebajó la calificación de deuda en moneda extranjera a largo plazo de Colombia a BB+, un nivel por debajo del grado de inversión, desde BBB-, y le asignó una perspectiva estable ante un deterioro de la deuda del país, después de que el Gobierno retirara un proyecto de ley para aumentar los impuestos que provocó protestas civiles masivas.
La rebaja se produjo menos de dos meses después de que S&P Global Ratings redujera el país a grado especulativo. Fitch Ratings cambió la calificación de la deuda a largo plazo en moneda extranjera de Colombia, pasando de BBB- a BB+; y revisó la perspectiva de negativa a estable.
El déficit
Según la calificadora, la modificación se explica principalmente por el aumento del déficit fiscal y la deuda pública, así como por la incertidumbre sobre su evolución en el mediano plazo.
Esto se debe al choque ocasionado por la pandemia de la covid-19 en la economía y sus efectos sobre las finanzas públicas.
Por su parte, dos agencias internacionales mantienen a Colombia en grado de inversión, Moody’s (Baa2/Negativo) y DBRS (BBB Low/Estable), mientras que dos han revisado la calificación al nivel BB+/Estable (Fitch y S&P).
Con esta rebaja, el acceso a crédito a tasas de interés más altas será de las primeras consecuencias.
Rodrigo Cifuentes, socio de Finanzas Corporativas de la firma BDO Colombia, analizó el impacto frente a la reciente calificación de Fitch Rating y las implicaciones para el país de la pérdida del grado de inversión.
Factores
De acuerdo con Cifuentes, la pérdida del grado de inversión de Fitch ocurre como consecuencia de muchos factores de análisis; entre ellos, el nivel de endeudamiento que ya tiene el país y que ya traía antes de iniciar la pandemia, que para solventar esta crisis tuvo que aumentar el gasto significativamente a través del aumento de su financiación, esto sumado a la caída de la reforma tributaria y las recientes protestas, lo que hicieron que esta disminución fuera inminente.
Pero, ¿cuál será el impacto? El impacto para las empresas se verá reflejado en el acceso a crédito y en las tasas de interés que serán más altas. Esto será como consecuencia, porque al aumentar el riesgo del país automáticamente suben las tasas de endeudamiento a las que el Gobierno puede acceder tanto externa como interna, esta tasa se usa de referencia para prestarle a las empresas en Colombia.
La tasa de cambio no se verá afectada significativamente, dado que esta era una medida que ya se tenía en las expectativas de los inversionistas, y si habían decidido el retiro de sus inversiones, estas las habían considerado uno o dos meses atrás.
Esta nueva disminución no afectará el valor del dólar en el corto o mediano plazo. En ese sentido, en este momento el país se encuentra en un escenario de baja inversión y no en expectativa e incertidumbre.