En las toldas reeleccionistas el optimismo es creciente, al punto que para sustentar sus pronósticos positivos en torno a las que consideran altas posibilidades del presidente Santos para repetir mandato, ahora utilizan los mismos argumentos que meses atrás los contradictores de la continuidad en la Casa de Nariño enarbolaban para pronosticar que el Jefe de Estado no seguiría en el poder y que en agosto próximo habría relevo en el llamado Solio de Bolívar.
En algunas ciudades de Estados Unidos a los conductores que tienen antecedentes de manejar en estado de ebriedad se les ordena instalar en sus vehículos unos medidores que les permiten establecer si están en capacidad de ponerse al volante. Incluso, en algunos casos si el conductor no pasa esa prueba, es decir que al soplar se le detecta aliento a alcohol, el vehículo no prende. En las películas gringas es común ver la utilización de este sistema de auto-detección de niveles de ebriedad.
A logringo
En los pasillos del Consejo de Estado no se habla de nada distinto a los procesos que ese alto tribunal deberá asumir como juez disciplinario del procurador Alejandro Ordóñez. De entrada esa competencia significa un cambio, pues en el primer período como jefe del Ministerio Público el Consejo de Estado fue el que postuló en la terna a Ordóñez (que había sido magistrado de esa alta corte), por lo que le correspondió a la Corte Suprema de Justicia ejercer como disciplinario del Procurador.