Editorial | El Nuevo Siglo

La sevicia parece no tener límite cuando se habla del accionar de la guerrilla de las Farc. Una cruenta prueba de ello, de las miles que han dado en las últimas décadas y que tanta muerte y dolor han causado a los colombianos, fue la manera miserable y cobarde como acabaron esta semana con la vida de dos integrantes de la Policía Nacional.